Ahora es posible tomar una mayonesa para celiacos y que pueda disfrutar de esta salsa tan mundialmente conocida y adaptadas a miles de recetas, como carne, pescados, arroces, ensaladas, ensaladillas, o tomar como complemento con patatas fritas o con una buena hamburguesa. Mezclada con otra salsa de tomate se hace exquisita para los más pequeños. Es uno de los aderezos más populares y uno de los más consumidos en todo el mundo. El hecho de que su base sea el aceite -está elaborada con aceite vegetal, huevo crudo, sal, zumo de limón o vinagre- la convierte en una salsa con un contenido graso y energético elevado.
El hecho está que una ración de mayonesa aporta la cantidad diaria de energía que una persona necesita. Así que es fácil de integrar en una alimentación equilibrada y variada sin abusar de ella. Además de los muchos atractivos que tiene para la nutrición. Muchas veces es que el problema es que las personas no se conforman con una sola ración. Por eso es básico tener especial cuidado en la alimentación de los niños, todo en exceso se convierte en perjudicial para ellos. Pero ofrecer a intolerantes la posibilidad de tomar platos con mayonesa sin gluten ni lactosa es una tendencia que ha surgido de unos años hacia aquí y que está teniendo un éxito desmesurado.