A la hora de cenar lo ideal son las recetas rápidas puesto que se llega de trabajar tras una jornada intensiva y bastante cansado y lo último que se busca es estar un par de horas en la cocina. Para invierno preparar sopas calentitas y entrar en calor y para verano lo ideal son las ensaladas, tostas o alimentos fríos. Ligueros y con poca grasa ya que una digestión pesada hará que duermas mal y tengas pesadez. Si no descansas, al día siguiente será un problema a la hora de trabajar.
De siempre se ha buscado las recetas fáciles para la cena. Una tortilla francesa, un huevo duro con un pan de rebanada tostado y aguacate. Se buscan recetas idóneas para gente con poco tiempo y ganas de comer bien, además y uno de los requisitos más importantes que los productos que lo componen sean fáciles de encontrar en cualquier supermercado o tienda de abastos. Una de los requisitos es tener todos los ingredientes y conocer de antemano la organización de cada día eso te ayudará a la hora de gestionar tu tiempo, tu alimentación y no caer en comer mal.